SHELMA T´astimu

SHELMA T´astimu
T´ASTIMU FILLA

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domingo, 18 de diciembre de 2011

Viaje al fondo de tú alma: La última navidad 5ª parte


      Tener una familia, era un sueño y ahora que la perdí, una lluvia de ojos caídos me atormenta por las noches, junto a mi destierro. La melancolía invade mi ser y la tristeza, es mi compañera. Tan implacable y serena, con su amiga soledad. Ellas me envuelven en sus brazos oscuros y el viento se lleva mis sentimientos, dejándome sólo y desnudo.....
       Barcos de confusión, con sus olas de llamas ardientes, atraviesan mis oídos y ensordecen mi ser. Quisiera olvidar, todo el odio gritado y recordar, sólo el amor callado. Y disolver los motines de mi existencia. Tengo sueños perdidos, naufragando en el océano, buscando la orilla de tus brazos. 
       Dijiste mucho acaso, en tus silentes palabras. Fue la sabiduría tu interprete y tus ojos, oían nuestros recuerdos. Pero, sé que esto, no es mi mundo ni la sed, éste silencio. Mi gran conquista será la esperanza.
       No te diré, que seas mi universo pues ya lo eres. Pero permite, que desee yo ser el tuyo. Y a cántaros, llenar tus mares para bañarme en él y purificarme. Más si consigo llegar a tu orilla, construiré castillos de ilusión, torreones de sonrisas y murallas de amor.
       Dormiré en tu regazo y creeré que soy el dueño del mundo. Como el niño indígena, que ilustra esta bella canción.  Y desde tu orilla, un pueblo puedo divisar ¿Quién sabe, como se puede llamar? Pero vuelvo a soñar despierto, cogido a la mano de mama.
       Oteo el horizonte ¡Y sí, ahí estás! Tú y mi sombras tras de ti. Pero no somos presente, ni pasado. Quizá seamos el reflejo, de un imaginario futuro. ¡Ojala...! Ay Jesús, que fácil es soñar despierto. En reposo junto a tú silencio,
No hay nada más hermoso,
que regalarme la vista 
con tú presencia.
Y recibir tu risa y tu cariño
¡Más que daría por un beso!
Sólo por uno, daría el universo.
He soñado ese beso
lo he vivido en mis desvelos
y te aseguro, que al recordarlo
me estremezco.
Nunca soñé un beso
y sólo por esta vez. Quisiera
desnudarte con mis versos.
¡Oh...Mi fruta prohibida!
déjame saborear tú cuerpo
y saciar mi sed, con tus deseos
y así juntos, juntitos.
Gozar del amor, 
aunque sólo sea en sueños.
Eres amanecer, en mis mañanas
y ocaso en las noches.
No te preocupes amor, la nieve 
cubrirá el polvo del camino
y llegará de nuevo la navidad
por primavera.
       Abba, tras su sueño, recordó su primer contacto con Jesús. Fue escalando una montaña, con nombre de mujer. Aleshores, era joven e imprudente y no tenía miedo. Era un espíritu libre y soñador. Pero, al descender de la roca, lanzó la cuerda con los dos cabos, ya que era el último y nadie podía asegurar su descenso. Pero, la mala fortuna hizo que un cabo, quedara más largo que otro, así pues cuando llegará a ese punto quedaría con una sola cuerda y caería sin remedio. Hay escuchó su voz ¡Para...Hijito! El susto le hizo detenerse y al mirar las cuerdas, apenas quedaban un palmo para el desastre. 
       Después de los años y tenerlo todo. Surgió su novia Soledad y su enemigo el Repudio; el de los seres queridos y creados. ¡Aleshores! Se lo pensó treinta veces, pero se perdió, murió su Fe y se exilió, poco antes de enloquecer. Y allí, en el país de las maravillas, encontró el despertar de su espíritu, ayunó, meditó e incluso habló con Jesús, por segunda vez. Y éste, le dijo:
Manel-li-to
       
       

sábado, 17 de diciembre de 2011

Viaje al fondo de tú alma: La última navidad 4ª parte


     La ayuda a tus semejantes, el hombro que ha de cobijar, el llanto de un amigo. El oído que escucha, la boca que alienta y la risa que contagias. 
      Abba, escondido en el rincón de su querida prisión, allí donde nunca dejaba que llegara el sol, donde sólo podía oír el latir de su triste corazón. El niño, porqué como un crío sueña despierto, piensa y piensa...
       Observa en su mar interior, el inmoble velero. Durante un tiempo indeterminado, horas o quizás segundos. El velero, empieza a navegar a su alrededor por aguas tranquilas, tan frías como cálido es su corazón. Escruta el perfume que deja, en su paso circular. Aleshores,  aparece en su mente el rostro del universo y su calma le hace sentir dichoso. Siente la paz en su cuerpo y su alma la refleja a sus semejantes. Cada día se siente menos terrestre, pero no menos humano.
       Otro velero, surca la estela del anterior, pero éste pasea triste, oscuro. Sin más luz, que el reflejo de la luna. La noche se torna fría, sin más calor que las llamas de su amor. El crepitar de la hoguera, salpica de poesía la negra noche y revolotean las chispas, como lluvia de palabras en su mente. El humo del fuego olía a recuerdos, abrasando sus deseos pedigüeños.
       Tristezas y añoranzas le hacían sentirse sólo, como un niño perdido en la playa. Recordaba el calor de su padre abrazado a su espalda. El amor de su madre a través de su mano nocturna. Abba, gritaba ¡Mama, tengo miedo de los sueños! ¿Se puede dormir despierto? 
¡Claro que sí, hijito! Ahora ya estamos durmiendo.
       Esos recuerdos, ya no tenían la misma fuerza, se tornaron terriblemente débiles. Eso le asustó y se dio cuenta, que ya no era un niño. Él, estaba muerto, se había ido para siempre y en su lugar había un hombre. Que sentía otra clase de amor y no recurría a sus padres, cuando miedo era lo que tenía.
       Mil palabras resuenan en la jaula del desván, mi música no puede esperar, a que suenen las campanas por navidad. Hay quien lucha por sobrevivir, pero también hay quien mata, por ser más fuertes y esos, son los que nunca vencen. 
       El mundo es una tumba, que tiene miedo a despertar, sigue dormido tras el televisor, idolatrando seres que corren tras un balón y famosos, que se consumen en sus miserias.
       Después que todos los bufones, se han encerrado en sus casas y los payasos, se han ido llorando. Se puede escuchar, el susurro de la felicidad por las calles, con sus huellas teñidas de rojo y el viento; silbando tu nombre junto al mío.
       Tener una familia, era un sueño y ahora que la perdí, una lluvia de ojos caídos me atormenta por las noches, junto a mi destierro. La melancolía invade mi ser y la tristeza, es mi compañera. Tan implacable y serena, con su amiga soledad. Ellas me envuelven en sus brazos oscuros y el viento se lleva mis sentimientos, dejándome sólo y desnudo.

concentración motaris.avi

martes, 13 de diciembre de 2011

Viaje al fondo de tú alma: La última navidad 3ª parte



       Mi gitana de porcelana,  
Abrázame fuerte 
Te esperare en el rincón del olvido,
 pero no tardes,
 la eternidad nos espera.
      Sí, sonrieme bajo las sabanas y mírame por siempre jamás. Tras el resplandor de lo inerte. Tus suaves palabras de amor, resuenan como un eco, en mis oídos enamorados. Sonidos extraños observo, en un mundo imposible, ¿Donde empiezan lo real y donde acaban los sueños?
       Ella era, como Flor de Loto, renacida de la podredumbre del estanque de la sociedad. Y como una sirena, vuela en nuestro Mare Nostrum. Pero, un amargo tormento se lee en sus ojos, de un pasado turbio y oscuro. Sus mañanas afloran mojadas, de sueños a flor de piel. 
       La verdad ruge entre misiles, al otro lado de la radio. La gente sigue matándose por un puñado de dolares y otros reivindican su fanatismo, en nombre de un Dios vengativo. Será posible que el mundo esté tan ciego, para no darse cuenta de sus barbaries.
       Perdónalos Señor, pues siguen sin saber lo que hacen... La tierra sigue dando vueltas, pero no se si adelante o hacía atrás. Quizá siempre estemos en el mismo lugar, el mundo necesita un poco de sosiego y que la lluvia, riegue nuestros corazones dormidos. Para despertar ese pensamiento, que todos tenemos en el más allá de nuestras tinieblas.
       Cada uno de nosotros, tenemos que construir nuestro pequeño mundo de amor y entrega a nuestros semejantes. Sembrar la semilla de la esperanza, en los corazones de los sueños. El tiempo y el mundo, rueda a través de su pasado y guiado por éste, sigue luchando por lo mismo, que se luchó desde el rocío de la creación.
       El fuerte, lucha por defender al débil pero inteligente y éste se aprovecha de la estupidez del otro, para que muera por una causa que no existe, por una bandera teñida de sangre del pueblo. A caso un puñado de tierra, se compra con la sangre derramada de los cobardes y los inocentes.  Mentes insulsas y fanatizadas nos quieren gobernar, para tenerlo todo, sin darse cuenta que sólo tienen campos de cruces y sangre caliento, en sus manos pecadoras.
        Pero la felicidad, es patrimonio de todos; el roce no debe crear odio, sino cariño y éste, dará de fruto el amor. Ese, que sueña el niño al amparo de su ánima. ¿Acaso no es bello, el latir de las plumas en el océano de los deseos?
       Abba, montado en un pájaro de cristal, fue navegando a la deriva, surcando el mar de sus pensamientos. Como el fénix que resurge de sus cenizas, surcando los cuatro vientos, entre suspiros dando amor y repartiendo esperanza, a sus hermanos así sean cristianos o musulmanes, judíos o budistas.
       Amig@s míos, navegar y soñad desde el fondo de vuestro ser, allí encontraréis, la belleza de vuestra luz, esa chispa de vuestros corazones. Que surge de repente, como un Cisne sagrado en un nuevo amanecer. El camino será largo, pero ahí encontrarás tu luz, el porqué de tú misión. La verdad de la vida ,está en esas pequeñas cosas que nos hacen grande, en nuestro día a día. 
        La ayuda a tus semejantes, el hombro que ha de cobijar, el llanto de un amigo. El oído que escucha, la boca que alienta y la risa que contagias. .....
Manel-li-to

lunes, 12 de diciembre de 2011

Viaje al fondo de tú alma: 2ª parte


        En la cama de Abba, había una muñeca gitana de porcelana; un bello recuerdo, de una navidad olvidada. La tomó en su regazo y lloró ¿Porqué? No lo sabía. Quizás eran los recuerdos que afloraban en su melancolía, pero no sentía tristeza, si no, una alegría que se mutaba en llanto.

       Cerro los ojos y escucho la voz de su mami... ¿Que te pasa hijito? No llores más y en vez de hablar sólo, escribe esas cosas que oprimen el alma. Tienes un Don maravilloso, hijito, eres un mensajero, un angelito que habla con él. Tienes que dejar escrito, ese legado que te ofrece el Espíritu Santo. Así, tú luz no dejara de brillar e iluminará otras ánimas solitarias. 
        Así es como Abba, empezó su carrera de poeta, poseído por su Musa, recibiendo las palabras que como plumas, volaban en su mente. Sí, esa era su misión, escribir con su alma para abrir otras ánimas. Y despertar el amor en todos los corazones. Paraíso, titulo su primer escrito y decía así:
       ¡Quién me presta un pensamiento! Para poder escribirlo. Ofrecerme una idea, para subir a la cumbre y ver el frescor de la mañana, apropiándose de su velo luminoso. Divina fe, es ésta que rebufa y cruje como los destellos de la lumbre.
      Que desparpajo subliminal, envuelve nuestro futuro, que ni tan siquiera el repiqué de los campanarios; repletos de nidos cigüeñales, pueden perturbar al mundo de su nuevo nacimiento. Fuertes lluvias de sangre, borraran la mitad de la población, terremotos humanos, apuñalaran a sus padres en las calles, por dinero.
       Muñeca de porcelana, la soledad, será tú mejor aliado para el despertar del pensamiento, que fluirá como un volcán. Sólo, existirá un mandamiento, el del Amor. Primero, hacía ti mismo, luego entorno a tú Dios y como una bendición: Reparte Amor, comparte tú vida y como un santo Grial, llena tu vida de sueños, así descubrirás que eres Inmortal.
        La muerte, es tan sólo una palabra, que inventaron los ignorantes por no comprender, la metamorfosis de los hijos de la luz. 
      El capullo de nuestra crisálida, existencia física, es nuestro primer cuerpo, que tras el envejecer se transforma en luz. Dejamos de arrastrarnos, como gusanos terrenales y sobrevolamos el principio de nuestra nueva vida. 
       Pero esa vida, no es el paraíso ni estaremos en el reino de Dios. Eso sí, el tiempo tomará otra dimensión nueva, cercana a la eternidad, pero allí también mutaremos nuestro cuerpo de luz, en otro más perfecto. Dejaremos de ser uno y entraremos en el reino de la creación, junto a nuestra media naranja, esa que nos habrá acompañado en nuestro camino. Y así, fusionados formaremos un nuevo ser bipolar.
       Dame tu mano, amiga 
Crucemos el umbral de los sueños,  
Te espero en la frontera del pensamiento,  
En el apeadero de la esperanza. 

Quiero saborear tu presencia,  
El resto de la eternidad 
Besar tu sonrisa, esa que me hace vibrar.
 Dame la mano hermana mía,  
Y crucemos los ríos de nuestra pasión. 
Dame la mano querida,  
Gocemos éste amor, como si fuera el primero. 
Dame la mano mi Musa,  
Y hazme el amor,  
¿Que daño puede hacer eso?

       En mi tristeza callada, al despertar la mañana, recordaré tus palabras, como música en tus labios de mujer. Dicen, que en el nuevo mundo, el cielo tiene otro color, por eso sus gentes son más cálidas y sus mujeres más hermosas. Paraíso, lleno de vida. pero quizá le falte, el frío de un día de invierno: A orillas de un mar de llamas, tras una chimenea de cristal, que rezuma calor.
       Mi gitana de porcelana,  
Abrázame fuerte 
Te esperare en el rincón del olvido,
 pero no tardes,
 la eternidad nos espera.

      Sí, sonrieme bajo las sabanas y mírame por siempre jamás. Tras el resplandor de lo inerte. Tus suaves palabras de amor, resuenan como un eco, en mis oídos enamorados. Sonidos extraños observo, en un mundo imposible, ¿Donde empiezan lo real y donde acaban los sueños?
       Ella era, como Flor de Loto, renacida de la podredumbre del estanque de la sociedad. Y como el fénix, vuela en nuestro Mare Nostrum. Pero, un amargo tormento se lee en sus ojos, de un pasado turbio y oscuro. Sus mañanas afloran mojadas, de sueños a flor de piel. 
       La verdad ruge entre misiles, al otro lado de la radio. La gente sigue matándose por un puñado de dolares y otros reivindican su fanatismo, en nombre de un Dios vengativo. Será posible que el mundo esté tan ciego, para no darse cuenta de sus barbaries.
       Perdónalos Señor, pues siguen sin saber lo que hacen... 
La tierra sigue dando vueltas, pero no se si adelante o hacía atrás. Quizá siempre estemos en el mismo lugar, el mundo necesita un poco de sosiego y que la lluvia, riegue nuestros corazones dormidos. Para despertar ese pensamiento, que todos tenemos en el más allá de nuestras tinieblas.
       Cada uno de nosotros, tenemos que construir nuestro pequeño mundo de amor y entrega a nuestros semejantes. Sembrar la semilla de la esperanza, en los corazones de los sueños. El tiempo y el mundo, rueda a través de su pasado y guiado por éste, sigue luchando por lo mismo, que se luchó desde el rocío de la creación.
       El fuerte, lucha por defender al débil pero inteligente y éste se aprovecha de la estupidez del otro, para que muera por una causa que no existe, por una bandera teñida de sangre del pueblo. A caso un puñado de tierra, se compra con la sangre derramada de los cobardes y los inocentes.  Mentes insulsas y fanatizadas nos quieren gobernar, para tenerlo todo, sin darse cuenta que sólo tienen campos de cruces y sangre caliento, en sus manos pecadoras.
        Pero la felicidad, es patrimonio de todos; el roce no debe crear odio, sino cariño y éste, dará de fruto el amor. Ese, que sueña el niño al amparo de su ánima. ¿Acaso no es bello, el latir de las plumas en el océano de los deseos?
       Abba, montado en un pájaro de cristal, fue navegando a la deriva, surcando el mar de sus pensamientos. Como el fénix que resurge de sus cenizas, surcando los cuatro vientos, entre suspiros dando amor y repartiendo esperanza, a sus hermanos así sean cristianos o musulmanes, judíos o budistas.
       Amig@s míos, navegar y soñad desde el fondo de vuestro ser, allí encontraréis, la belleza de vuestra luz, esa chispa de vuestros corazones. Que surge de repente, como un Cisne sagrado en un nuevo amanecer. El camino será largo, pero ahí encontrarás tu luz, el porqué de tú misión. La verdad de la vida ,está en esas pequeñas cosas que nos hacen grande, en nuestro día a día. 
        La ayuda a tus semejantes, el hombro que ha de cobijar, el llanto de un amigo. El oído que escucha, la boca que alienta y la risa que contagias. .....
♥♪Möùnêr Łuz entre sombras♠♪♥


viernes, 9 de diciembre de 2011

Viaje al fondo de tú alma: La última navidad 1ª parte



       El personaje de mi cuento de navidad, eres tú. Sí, tal cual eres; delante y detrás del espejo. Abba, que así se llama nuestro amigo, despertó un día siete de diciembre, allá por el 2011. El hastío, la soledad entre la multitud, el desasosiego y las eternas preguntas circulaban en su mente dormida. Aleshores -entonces- notó el aliento del espíritu santo y su luz, se derramó en su alma. Lo cierto, es que siempre había estado allí, la cuestión, es que no la había sentido u más bien: Pensó, que era un cuento de Hadas; como el Papa Noel ¡O quizás!, desvarío de locos románticos; llamados Profetas, Mesías o Iluminados y ¿Por qué no? También Poetas.
       Abba, era poeta, sencillamente estaba poseído por el espíritu santo. Es bien sabido, que entre todas las formas de arte, la poesía es, la más digna de admiración, al menos en la tierra. Su esencia es la más noble función humana; tan sólo con la palabra.
       Dicen, que la poesía, la verdadera, se confunde con la profecía. Los antiguos, no dudaban de que los poetas estuviesen poseídos, por un ser divino; la Musa. Los términos acompasados del decir poético, eran los de un Dios encarnado. Y el Dios de la poesía, era el propio Apolo, director del coro de las musas y fuente de toda profecía.
       Abba, no sabía nada de profecías ni tan siquiera se consideraba poeta. Era un escritor frustrado ¡Bueno no exactamente! Era un poeta escondido dentro de si mismo. Que jamás, había compartido su riqueza interior, su tesoro de letras difusas y olvidadas en el tintero de sus recuerdos. Fue entonces, cuando rompió el silencio y esputó todo su amor, su dolor, incluidos sus miedos y odios.
       Y llegó ese día, en que sintió que tras compartir y deshojar sus sentimientos. Era otro, era distinto, hasta la alegría floreció en sus espejos. Y la expresividad retornó con sus palabras, con sus sueños y hasta sus gestos volvieron a renacer; desde su estampa sepulcral y envejecida, por el olvido y el silencio.
       Se observó en el agua del estanque y pudo ver su camino, su misión. Ésta, sería su última navidad ¡Pero no!, no había quedado aún con su novia, la muerte. Era la última navidad, de su ensombrecida vida. Su luz, como una luciérnaga volaba hacia su destino. Y como un búho en el desierto, observó los oasis, donde tenía que dirigirse.
Divisó el oasis de su primera navidad y no era otra, que su futura navidad, el dichoso 2012. 
       Se vio, allende los mares, surcando lagos en un continente extraño. Observó en los cielos, parte de la alineación planetaria y su energía cósmica, asoló y mutó la genética de los hijos de la Luz.
       Abba, ingreso pues, en el ejercito de la salvación. Y en ese continente mágico, empezó a construir un futuro nuevo. Se mezcló con los desamparados, iluminó con su ayuda, la sonrisa de los niños. Escuchó a los locos; habló con los sordos, y con las imágenes de sus palabras, otorgó la visión a los ciegos y así todos juntos, con el amor que se tenían. Pudieron hacer hablar a los mudos y enloquecer a los cuerdos.
       Pero tan sólo era un posible oasis, quizás era un espejismo, entonces divisó otro oasis. Estaba en su tierra, junto a los suyos, sus hijos le decían papi Abba, lo querían con todos sus defectos y todos sus errores. Pero ese oasis, estaba muy lejano y tal vez al llegar allí, se desvaneciera como humo de arena. Era un pecador, y sólo Cristo podía perdonarlo, sin embargo sus tres frutos, no tienen porqué hacerlo, pero tampoco es bueno odiar al padre.
       Por eso, entre llantos se postraba ante el silencio y suplicaba clemencia y misericordia. Ya dejó de pedir el cariño de sus hijos, al Dios. Sólo deseaba que fueran felices y que el rencor, no fuera creciendo en sus pequeños corazones, junto al odio.
       Pero bueno -exclamó para sí-. Aún me queda un año, para esperar el milagro o partir, al otro lado del mundo ¡Quién sabe donde puede ser! Sólo espero, dar felicidad y encontrar a mi musa, esa que me ha de acompañar; desde éste principio, del último tramo de mi vida.

        En la cama de Abba, había una muñeca gitana de porcelana; un bello recuerdo, de una navidad olvidada. La tomó en su regazo y lloró ¿Porqué? No lo sabía. Quizás eran los recuerdos que afloraban en su melancolía, pero no sentía tristeza, si no, una alegría que se mutaba en llanto.
       Cerro los ojos y escucho la voz de su mami.......

Manel-li-to

jueves, 1 de diciembre de 2011

Vagabundos Ferroviarios 3 final


       ¡Angie, angie!, tu llanto aflora en mi pecho y no puedo evitar enamorarme de ti -exclamó Goz-. Tengo que irme lejos, muy lejos de aquí, pues no puedo evitar este amor que me quema. Me siento como un niño, que corre hacia su fin. Cariño así va todo, algunas cosas son así.
       Un día me cogiste la mano y toda mi alma fue tras de Vos. Ahora tengo que partir, el tren de mi futuro, me espera en su vía muerta ¡Pero, que locura es ésta! -gritó Angie-. No, por favor, no digas nada. Ésta vez compre mi billete, prométeme que cuidaras de Demís, es tan inocente.
       -- Sabes que lo haré, pero dame un abrazo y un millón de besos...
       Esa despedida, le dejo un buen sabor de boca y con paso lento, se difumino en la niebla. Escuchó un silbato y una voz, grito su partida -último tren, no lo dejes escapar- Un ave extraña, estaba suspendida en el anden ¿De donde venía? No lo sabía. Entró en su jaula ¿A donde volaría? No lo sabía. Se sentó junto a su alma y se dejó llevar.
       Ella, le recordó toda su vida. Pudo vislumbrar todos sus actos. Era la película de su vida, sus sentimientos, sus amigos. Cuando vio a Demís, no pudo contener sus lagrimas.
       El ave ferroviaria, descendió súbitamente y estacionó en un apeadero rural. Goz, quedó pensativo y decía para sí:      ¿Porqué lloro? Ya nada puede hacerme daño, mis penas son insignificantes, pero mi lluvia de lagrimas, sigue su curso.     Barro los trazos de la vida de ayer y el viento susurra tu nombre. Cuantas cosas pueden pasar, en unos segundos

La vida, puede empezar de nuevo
la muerte, puede renacer.
Un vuelo de palomas, puede cambiar el tiempo
Una mujer desnuda, puede parar el mundo
y pisarlo con sus pies de cristal.
La noche es larga y podría coger al mundo
y besarle en su boca tenebrosa.
Un amor de tiniebla, suena pero no se ve.
Debo quemar mis últimos cartuchos,
y disparar contra mi pasado.
Así podré ahuyentar, mis fantasmas
y a cantaros, llenar los mares de mis deseos.
   El tren, remonto el vuelo sobre la vía láctea y su estela parecía un cometa. Una mano, se posó en su hombro -¡Su billete, Señor!- Goz, sintió un calambre y una sonrisa floreció de alegría. Ambos se abrazaron, con toda la fuerza de la amistad y ahora, con toda la eternidad por delante. ¿Pero dime, donde está Angie? -preguntó Goz suavemente-. Ella, amigo mío, dejó escapar éste tren. Pero yo, aprecio más tu amistad, que todos los amores del mundo.