SHELMA T´astimu

SHELMA T´astimu
T´ASTIMU FILLA

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miércoles, 17 de abril de 2013

Capitulo 8: Los Enamorados VI








     Finalmente se incorporo y sin decir palabra, se situó detrás del espejo y se desprendió, de toda su ropa, con la excepción de su sombrero. Luego, de repente, salió como si surgiera del espejo. El efecto de las velas, ayudaba a la imaginación ¡Ooooh! —exclamó ella, terriblemente conmocionada al verlo aparecer de aquella guisa.
      Su rostro adquirió todo su rubor y apartó la mirada, pero no antes, de haber visto su verga, que mostraba una orgullosa erección. Él, la observó, aquella visión pareció fascinarla, a pesar de su alarmada vergüenza o pena como ella solía decir en vez de vergüenza, cosas de la jerga, pero no dejó de hacer miradas fugaces, con los ojos medio entornados. A pesar de si misma, se vio obligada a mirar y valorar su tamaño, para saber si aquello, sería capaz de entrar en su rincón.
       Avanzó un paso hacia ella, rodeó su cintura con el brazo y atrajo, su temblorosa figura hacia sí. Estremeciéndose Hemis, ante la exquisita sensación de su contacto. Ahora estaban ambos, de frente al espejo, reflejándose en él.
      Luz, emitió una queja de placer, entonces, la mano izquierda de Hemis, subió desde sus nalgas, a su pecho y Luz, lanzo un grito ahogado. Como disfruto jugando con esa glándula, excitando su diminuto pezón, firme y juvenil. Tan maduro y tan virginal a la vez.
     El rostro de Luz, reflejado en el espejo, indicaba su placer; con la cara arrebolada, las aletas de la nariz dilatadas, los ojos medio cerrados y el trasero palpitante. Finalmente, aparto sus manos de su pecho y se deslizo hacía la entrepierna, Luz, que se percató, cruzó las piernas por instinto.
      Entonces ella, se incorporó y agarró la cabeza de Hemis, y la atrajo hacía sí besándolo apasionadamente.    Las manos de Hemis, se perdieron en sus curvas y se regalo acariciando sus nalgas apretadas. Ella tampoco anduvo manca y recorrió el cuerpo de Hemis, cual ciego busca su camino y al llegar a la entrepierna. Descubrió su miembro en expansión, nunca había tocado algo así, parecía que tenía vida propia. Entonces, acercó sus labios carnosos a su verga y la beso con suavidad. Hemis, contempló la escena tras el espejo y se dejo hacer entre gemidos durante unos minutos, hasta que tuvo que recular para no sucumbir.
     Se incorporo a duras penas y saco una cajita de su chaleco. Extrajo una pluma, de las tres que habían en la caja y empezó a escribir un poema, en su seno. Recorrió el contorno de su busto, con suaves palabras de amor. Al principio, ella no entendía sus susurros, pero los sentía a flor de piel. Luz, contemplaba exhausta el espejo y observó, como se erizaba su seno ya enhiesto, tenso y lleno. Hemis, no pudo resistir más y empezó a besarlo y lamerlo amorosamente, hasta que volvió a ponerse blando y flexible.
       Al poco, se dispuso a escribir el final del poema, junto a su cueva. Empezó con suaves vocales, una A delimitó su triángulo, la O dibujo su contorno y la i afirmó su pasión. Cuando añadió la M y la R, su Amorío, fue escrito tras un suspiro de placer. Cuando puso el punto final, ella echo la cabeza atrás y gritó con todas sus fuerzas, retorciéndose de forma salvaje e incontrolada. 
       El espejo, dibujaba la transformación de sus labios, al principio empezaron a cerrarse y luego, se abrieron un poco. Hasta que finalmente se ofrecieron, como si invitaran a la pluma a introducirse más al fondo, como así fue. Palpitaba de forma excitada; y de golpe, su vulva fue poseída por un flujo irresistible de placer y casi exigía en silencio, la satisfacción inmediata de todos sus anhelos.

      Llego ese punto, en que toda reflexión es inútil, donde todos los sentidos se juntan, en un sólo deseo. Ese ansia contenida tras el espejo, esos deseos salvajes de posesión y ser poseído. Esa sumisión que nos llevaría a la muertes, si nos lo pidiesen. Sus cuerpos, al fin, se fusionaron en un éxtasis indescriptible. Sus almas volaron ¡Si volaron en el infinito, en la nada y en el todo!
       Remojaron su pasión, en el océano de las estrellas, calentaron sus almas, en el remanso de los soles y refrescaron sus deseos, en el pozo del amor. Y ahora discretamente, apagaremos las velas y dejaremos, en la intimidad a nuestra pareja. Y seguiremos, con el amanecer de un nuevo día y el despertar de nuestros amigos.
Shiva, fue el primero en levantarse y al acercarse al estanque, miró por casualidad, a través de la ventana del cobertizo y vio, como yacían los dos amantes extasiados. Para no molestar, se dirigió al establo, a dar de comer a los caballos. Después, el olor del fuego, le condujo al comedor y allí estaba Tivisae, preparando el desayuno.

— ¡Buenos días, Tivi! Que bien huele aquí...
— ¡Hola, Shiva! Te levantas pronto...
— Sí, pero hay quién no ha dormido. Como ese par de tortolitos que encontré, en la caseta del estanque... ¡Como los envidié al verlos...!
— ¿Entonces qué? —preguntó un tanto ruborizada, por el comentario— ¿Te apetecen unas torrijas con té o prefieres café?
— Tomaré un té con leche, gracias, pero ¿Qué es eso de las torrijas?
— Es pan duro mojado en leche, rebozado con huevo y frito. También se puede remojar en vino, pero esta vez, pensé en nuestros amigos musulmanes, que no tardaran en bajar... Estarán rezando, mira por ahí aparecen...
— ¡Buenos días, amigos! Uh... Preparando el almuerzo ¡Eres una artista Tivisae, hasta hiciste té!, gracias mujer por pensar en nosotros...
— ¡De nada, chicos! Ya podéis sentaros, esto ya esta listo.
Mientras ellos comían Hemis, despertaba abrazado a su Luz. La contemplaba y no se creía, que fuera real. Ella, abrió los ojos y susurró. —Bon díiia mi amooor, que corta fue la noche, pero ¡Debo ofreser una pinta horriiiible..!
— No digas tonterías, mi pequeña Dulcinea. Nunca vi flor fea, al alborear la mañana y vos, no sois una excepción, mi lirio de Luz...
— ¡Que galante Sos! Pero ven acá y dame un beso, te lo ganaste Concholes... Te amo muchote, mi poeta...Eres tan chevere
Aquel beso vespertino, despertó el deseo. Y la pasión nuevamente, se apoderó de sus cuerpos, pero esta vez, fue ella quien tomó la iniciativa y sometió a Hemis, a sus fantasías soñadas. Pero eso, no lo voy a contar, lo dejo a vuestra imaginación, mis queridos lectores. Cuando el sol apuntaba en su cenit, se vistieron y fueron a la masía. Los demás, habían ido al pueblo, sólo estaban las gatas, esperando la comida.
— ¡Bueeeno! —exclamó Luz— Voy a preparar la comida ¿O no tenés hambre mi amooor?
— ¡Vaya que sí! Me comería un cochinillo entero y crudo....
— ¡Estee, bien! Lo prepararé, aquí ahí de todo. Coge un poco de queso y sirve vino, mientras haces el fuego.
— ¡Vale, guapetona! Esto si que es vida, querida. Que bueno que nos conocimos, me siento otra persona, después de esta noche mágica.
— ¡Sí, es sierto! Yo también noto algo espeçial, sobre todo este escosor, que tengo entre las piernas. Que por sierto, todavía me tiemblan ¡Pero, estuvo chevere...Super!, nunca pensé que el sexo fuera tan plaçentero.


Cuando ya estaba la comida lista, aparecieron lo demás por la puerta. El comedor, parecía un banquete Real. En el centro del salón, estaba el fuego a tierra, con una campana enorme que ascendía, como una sombra negra, en forma de cucurucho. Su color negro Ónix, envolvía la cúpula y resplandecía con las brasas. En ella, habían dibujos y símbolos de todo tipo, desde estrellas de David, a Rosas del Desierto. Jeroglíficos, pasajes de la biblia y escritos del Corán.
Alrededor del fuego, había una mesa de mármol Rosa tipo Italiano, pero ésta, era de las canteras de Macael -Almería-. Era un circulo perfecto, cerrando el perímetro de esa fuente de Luz y de calor. Hemis, estaba tanteando las brasas y la carne. La renacida Luz, canturreando mientras distribuía los platos y demás. Era una canción muy alegre, que describía las maravillas del Amazonas y los amores salvajes, de esa tribu de mujeres, del río más poderoso del mundo. Luz, dejo de cantar al escuchar el saludo.
— ¡Hola parejita! —exclamó, Assís con sorna— Parece que hemos llegado justo a tiempo, para el banquete ¿Que se celebra, tan copiosamente?
— ¡Pues si! Ya queda poco ¿Dondé estabais? —objetó Hemis, ruborizado sin contestar la pregunta.
— Hemos ido a dar un paseo por la Mola -montaña de Sant Llorens de Munt- y es francamente bonita y muy parecida a Montserrat. Estuvimos en el Morral del Drac —el bozal del dragon—
Allí, un pages —se llaman así, a los campesinos catalanes— nos explico una pequeña leyenda de la zona. Según nos explicó: Los moros, derrotados por el Conde de Barcelona, para vengarse, trajeron de África un dragón, que criaron en la cueva de Santa Agnès. Y cuando se hizo grande, asustaba a toda la comarca y vencía a todos los caballeros. Hasta que el Conde, se vatio con él, y lo hirió de muerte, justo en ese sitio. El dragón, fue a morir a la montaña del Puig de la Creu, justo encima del pueblo de Castellar del Valles.
— ¡Estee, si es curioso, si! Por Acá cuentan infinidad de leyeendas, al caso de los Dragones, pero esa no la conoçia....—objetó Luz.
— ¡No te acostaras, sin aprender algo nuevo! —parafraseo Shiva—  Y si no es así, mal asunto, no te acuestes...
Al caer la tarde, con el sopor de esa belleza rural, se sentaron todos en el jardín a contemplar la puesta de Sol. Mientras, charlaban distendidamente de lo sucedido en la cueva. Ninguno sabía que hacer, con aquella bestia inmunda, pero tenían la esperanza que S-Huur supiera el camino a seguir.
— ¡Oye, Makdub! Mañana entramos en Ramadán, glorioso mes nos espera —dijo Assís—
— ¡Vaya que sí! Ya tenía ganas que llegara...
— ¿Que es eso de Ramadán? —preguntó Tivisae.
— Pues veras, Tivi —objetó, Assís— La Sura del Coran, 2:87 dice: ¡Creyentes! Se os ha descrito el ayuno, al igual que se prescribió a los que os precedieron. Quizá así, temáis a Dios. Éste, es un mes especial para los musulmanes. Conocido por el mes del ayuno, desde el alba hasta la puesta de sol. Se le considera el noveno mes, del calendario musulmán, que se rige por la Luna, por eso no siempre coincide, en el mismo día tras pasar un año.
       Esto les sirve, para fortalecer su fe. Históricamente, el 27 de ramadán, según la tradición, hace 1429 años, comenzó la revelación del Corán a Muhammad. En recuerdo de eso, se celebra en el Islam la llamada Noche del Destino. Pero también hubo otras revelaciones, dentro de ese mes de ramadán, tales como el día 2, cuando la Torá fue revelada a Moisés; el 12, las enseñanzas bíblicas a Jesús y el 15 los Salmos a David. Es una época de purificación del cuerpo y del alma, para así acercarse a Dios.
La palabra Ramadán, significa -Gran Calor- y al final del ramadán, se entrega el Azaque, que es el tributo obligatorio, que se da en función de tus bienes, para los más necesitados.
— ¡Ahora lo entiendo, bien! —exclamó, Tivisae— Pero tú, Makdub ¿No eres Moro, verdad?
— No, hija, Aunque mi padre adoptivo si lo era, pero me convertí hace unos años, por necesidad espiritual. Me sentía vacío y nunca creí en el cristianismo, así pues, en uno de mis viajes descubrí esta religión. Ella, me ha llenado el vacío y me ha echo ser mejor persona. Estaba escrito, por eso me bautizaron con el nombre de Makdub. Y la verdad, es que fue un acierto, ahora me siento en paz conmigo mismo.
— Entonces, cuando rezas ¿Como lo haces en árabe o en cristiano?
— Lo mezclo, por el día en árabe y en la noche en castellano...
— ¿Y que dices en tus plegarias?
— Pues veras. Asma, shuff  —Escucha y mira, entonces hizo el rito para el rezo. Se incorporó y dirigió a la fuente, allí se descalzó, se lavo la cabeza, la cara, los dientes, las axilas y el pecho. Luego se sentó en una piedra y lavo sus pies. Alzo la vista y busco la dirección de la Meca, desplegó una pequeña alfombra de hermoso colorido y la situó a sus pies.
       Entonces, cerró los ojos, puso las manos con las palmas hacía arriba, formando un triángulo, como si sujetara un libro, o fuera a beber agua. Cantó la sura en árabe, con una melodía tan hermosa, que erizaba la piel al oírla. Era una estrofa corta, la repitió tres veces. En su último canto, con las manos unidad y los pulgares extendidos, alzó los brazos al cenit, bajo las manos, toco su entrecejo, luego la boca, bajo hasta el plexo solar -cerca del corazón- y se arrodillo. En esa postura, desvirgo su plegaria pagana:
       Desde el punto de la luz, en la mente del Dios
Que afluya la Iluminación a la mente de los hombres
que la luz descienda a la tierra
desde el punto de Amor, en el corazón de la nada.

Que afluya el Amor, y resurja en los corazones 
de los hombres,
que la Paz -Salama-  retorne a la Madre Tierra.
Desde el centro de Universo
donde la la Volutad es conocida y Expandida.
Que el propósito, guíe a las Voluntades de todos los Seres.
El propósito que los sabios conocen y sirven.
desde ese centro llamado, la Raza de los Hombres,
que se realice el plan de Amor y de Luz,
para sellar la puerta, donde se haya el mal interno.
Que la Luz, el Amor y el Poder,
restablezcan el plan en la Tierra.
— ¡Amen, Amina, Amena! —Imploró, Tivisae, juntando sus manos— Bellisima Plegaria,. Me gusto mucho, Makdub, y aprovecho la coyuntura e iré a mis aposentos a rezarla. Buenas noches a todos...
— ¡Bona nit, Tivi! —Exclamaron todos al unisono. Ya es hora que nosotros nos recojamos también, insinuó Assís. Mañana si Dios quiere, llegara Dimoni, a ver que nuevas trae.
A las cuatro y media, se levantaron Assís y Makdub. Para su primera plegaria y comer bien, para soportar el largo día de ayuno. Y justo, cuando empezaba a salir el sol y ellos oraban, junto al horizonte en mitad del sol naciente, apareció la figura de un Halcón africano, era el hijo se Samira...... Aún no tenía nombre, su Madre se encargaría de ese detalle.... A los pocos minutos, llegó S-Huur a la Masía.
— ¡Hola, amigos! Ya estamos aquí. Os presento a mí mujer, se llama Rabha. Y estos dos locos, son Assís y Makdub, los musulmanes que te hable...
      
— ¡Hombre, Dimoni! Te estábamos esperando... ¿Habéis tenido buen viaje? —Exclamó, Assís.
— ¡Sí, Hincha alá! —asintió, Rabha—. El camino fue más rápido, de lo esperado. Mi esposo se encargo de ello.
Se acicalaron y tomaron el desayuno, contando las peripecias del viaje. Gracias a Sombra o Niebla, la yegua con vista de gata. Que galopaba de día y brincaba cuál gato Alado, surcando la noche a la velocidad del Silencio. Llegaron, en tan sólo un día.
       El Desayuno se desarrollo, como un espectáculo de Amor. Rabha, descogía los mejores manjares y como una tierna paloma, depositaba pequeñas porciones, en el Pico de su amado S-Huur. Ella, no comía más qué, lo que probaba antes de ofrecerlo, con esa delicadeza propia de una madre. Y en los postres, verlos comer las fresas y las cerezas, sucadas en miel. Era todo un acto de sensualidad, ternura y pasión, de una mujer bella entre las más bellas.  El silenció envolvía la estancia, pero un sonido sibilante, brotó en la penumbra de la escalera y apareció Shiva.
— ¡Que sorpresa, Dimoni! Me alegra verte, pero ésta bella Dama ¿Quién es...?
— Es mi esposa, se llama Rabha. Shuff  Assisa—mira querida  — , éste es Shiva, el encantador de serpientes..
— ¡Saludos, Señora! Su belleza es desbordante ¿De donde sois?
— Sucram —gracias—. Nací en Damasco —Siria— pero me han criado en Egipto, mis padres tuvieron que exiliarse, por motivos políticos y religiosos.
Rabha, era una pitonisa reconocida  allende los mares. Sus ojos, de ese azul salvaje y profundo hipnotizaban. Su cara, era una escultura egipcia, bella, inmutable, misteriosa y tentadora. Lucía un vestido vaporoso de seda y todo tipo de abalorios mágicos, de gran significado. Su talle era avispado y le sacaba una cabeza a S-Huur, realmente era una pareja estrambótica.  
— ¡Bueno, Shiva! —vocifero S-Huur— Vamos a dar un paseo y me cuentas vuestra aventura...
— ¡Claro que sí! Vamos, hay tanto que contar, Dimoni...
Después de explicarle todos los detalles de aquella bestia, se dirigieron al jardín botánico. Allí prepararían la pócima adecuada, para acabar con aquél engendro infernal. Al entrar al invernadero, una mezcla  de aromas, humedad y colorido se adueñó de Shiva. Campos de Lavanda, vinieron a su mente, Lirios, Magnolias, Azucenas, en fin. Un arco Iris perfumado repleto de Luz y de vida.
       Era una cúpula de cristal blando-plástico-, algo extraño en esa época. En el centro había un estanque de rocas volcánicas, con un surtidor de agua luminoso. Los nenúfares, se mezclaban con los peces y las ranas. Los pajarillos tenían sus nidos colgantes, repletos de crías. Sí, era un pequeño paraíso terrenal.
— Lo primero que debemos hacer, es un brebaje para tomar nosotros —objetó S-Huur con una de sus sonrisas sarcásticas— y poder soportar la pestilencia, para acercarnos a él. Haremos una infusión suave de Beleño, estramonio y mariguana. El Beleño es toxico, pero en pequeñas cantidades, no es peligroso. Aquí en Catalunya al Beleño, se le llama Herba de la Mare de Deú —hierba de la madre de Dios—. Lo usaban las brujas para entrar en trance, su uso abusivo produce alucinaciones y lleva al paro cardíaco.
        Y el estramonio, lo usaban los Celtas Hispanos, para preparación de maléficas pócimas bruje riles, por sus propiedades alucinógenas. Y la María, a parte de la risa, nos dará valor para afrontar el peligro, como hacen los Hashashis. Ahora amigo Shiva, prepararemos los dardos para el bicho, pondremos Mandrágora, que es narcótica.
  — ¡Cierto! —afirmó Shiva, animado— Dice la tradición popular que la Mandrágora, recuerda la figura del ser humano. Está vinculada desde la protohistoria hispánica, con las brujas y se obtenía por la eyaculación post-morter de un ahorcado. Cuando el semen, penetraba y preñaba el suelo.
— ¡Ja, ja, ja! Eres sorprendente Shiva, siempre tienes una historia para todo, me encanta tú compañía ¡Buen vamos a ver! Pondremos también Ruda, que seguro que sabrás que lo usaban las brujas, para sus conjuros y exorcismos. Y como no, mi Belladona —exclamó acariciando la planta—, tiene acción calmante, narcótica y es muy venenosa. Y para rematar, pondremos Cicuta, es muy alucinógena y mortal...
— ¿Sabías que con ella, se puso fin a la vida de Socrates...? Creo amigo Dimoni, que con esto, sino lo matamos, al menos lo dejaremos inconsciente.
Cuando se estaba poniendo el sol, S-Huur los reunió a todos alrededor del sauce llorón. Les informó, que sus armas estaban elaboradas y que al amanecer, partirían a la cueva. Se quedó observando al sauce y sentenció, iremos sólo los hombres.
— ¡Bueno! Ahora que esta todo claro, tomad este brebaje. En cada comida, tomáis la dosis señalada, para que os acostumbréis a la droga ¡Mira, Shiva! Ésta ampolla es para tus amigas, es inyectable a ver si así nos pueden ayudar.
          A la parejita feliz, empezó a afectarles el brebaje, ya que no paraban de reír y gesticular. Tan sólo el silencio, se adueño de las risas, al juntar sus labios en un beso largo y profundo. Hasta los presentes aplaudieron al terminar. Shiva y Alisae, estaban un poco a parte, hablando del Grial. Shiva, había enterrado su vergüenza y tomó a Tivisae de la mano y fueron a contemplar la luna.
— ¡Mira y escucha, Tivi! El Grial es un signo de poder regio, que encierra un misterio y posee virtudes sobrenaturales. Sana, nutre y es capaz de regenerar la vida, resucitar los muertos y garantiza la fertilidad de la tierra.
Pero sobre todo ilumina, a quien es digno de contemplarlo. Más, quien no es digno de ello, es destruido o transportado en el tiempo ¡Éste objeto, cariño! —susurró sin poder dominar su sentimientos, a la vez, que sus dedos rozaron su mejilla aterciopelada—, constituye un autentico misterio iniciático, en el sentido, de que por su simple contemplación, se alcanza de forma inmediata, el conocimiento superior que permite superar la codicia humana, para acceder al Gnosis.
— ¿Que es la Gnosis, Shivi? —preguntó con una voz cautivadora.
— La palabra viene del Griego y significa coñocimiento, perdón, conocimiento....
— ¡Jijijijij! Parece que te esta haciendo efecto el brebaje, pero sigue...
— Si, tienes razón, hacia tiempo que no reía con una mujer... Pero bueno, no es un conocimiento intelectual, sino uno oculto, que es experimental y su propósito, es el desarrollo integral del ser humano. La meditación, es como una puerta, querida Tivi. Ésta, abre un camino hacia el conocimiento de los fenómenos de la natura. Así, no necesitamos creer en algo, se puede saber. Podemos ver los que los ojos no ven y oír, las visiones del espacio tiempo.
Masas físicas, existen por encima y por debajo, de todos los límites de las percepciones sensoriales externas. Como Jinas, donde se encuentra Shelmi, el castillo del grial y parte de esta montaña. Éstas dimensiones, son invisibles y podemos percibirlas, sólo con la clarividencia. Al igual que en nuestra imaginación o los sueños...
— ¡Menuda vaina! Parece tan fácil así explicado que seguro que es cierto.
— ¿Vaina, que vaina? Parece que no soy el único afectado por el brebaje, jejejejeeje...
Así empezó una cadena de risas sin sentido, y una conversa abstracta que sólo ellos entendían. Tivisae, tomo la mano de Shiva y beso sus dedos, mientras le decía, con una delicadeza sensual. Eres un ser muy especial cariño, tus palabras son mágicas y tú alma, es pura como el agua del río. Mira siente mi corazón como galopa desbocado. Ella, puso la mano de Shiva, en su pecho y sintió su calor como un abrazo de energía.
Shiva quedó paralizado con aquella escena, sus ojos quedaron fijos entre su mano y el pequeño pecho de Tivisae. Su piel era suave y electrizante, su tono moreno relucía con el reflejo de la luna y dibujaba, un lunar tentador entre sus senos. Shiva no pudo contener más sus deseos y la estrecho entre sus brazos. Con una pasión y una delicadeza propias de la ingenuidad virginal.
— ¡Oh, querida! —susurró junto a su oído—. Esto, si que es magia, este sentimiento que brota de mi interior, no sé que nombre darle pero no importa.
Es como estar en un ensueño, sólo tengo dedos para acariciar tus ojos, con mis palabras. Abrazarte con mis sentimientos, en mi dulce ensueño. Darme un poco de sosiego, yo te daré una sonrisa al viento. Regalarme tu voz, cuéntame un cuento... Hazme dormir despierto y entre susurros, recordare estos versos, para hacer realidad este hermoso sueño. Tivi, siento miedo al percibir, que su aliento penetra en su alma, ese aliento divino, que sabe a rosas de invierno. Aroma embriagador que me enloquece... Besame, besame antes que despierte...

Tivisae, empezó con suaves besos en su cuello, ascendiendo hacia su barbilla imberbe..... La luna en todo su esplendor, se tuvo que nublar para no descubrir los secretos, de su encuentro. Los dos habían nacido, bajo la constelación de Cáncer. En la época de maduración de los frutos, cuando la natura es más fecunda. Su planeta regente es la Luna, por eso, se les asocia con la gestación, la madre, el agua, la leche materna y el útero. El dominio de la Luna y la exaltación de Venus, hacen de nuestra nueva pareja, seres receptivos, un tanto pasivos y sensibles. Se sienten como niños, atados a su infancia, al pasado, a los recuerdos. 
Tienen ambos un carácter melancólico, introvertido, con miedo al futuro. El mundo de la realidad, les atemoriza y aman refugiarse en el ensueño y la fantasía. Tienen una profunda intuición y una afinada sensibilidad. Tivisae, se caracteriza por su humor inestable, inquieto y alterno, entre momentos de introversión y de entusiasmo. Sin embargo, es muy susceptible y muy vulnerable, si es herida se cierra en su concha. La Luna para ella, le da fantasía, imaginación, vida interior, simpatía, instinto maternal y mucha, muchísima dulzura.
La Luna, tras despejar su vista nublada, pudo observar los secretos de sus hijos lunáticos. A Shiva le produjo risa y escalofríos, los besitos en el cuello y deseo, que no terminara esa sensación. Tivisae, con cierta timidez, se aproximo a la comisura de sus labios, cerro los ojos y acarició con su lengua, el contorno de su boca. Aquello fue el sumun del nirvana para Shiva, era su primer roce amoroso y de repente el ruido de caballos y unas voces extrañas surgieron en la noche para romper ese hechizo.
— ¡Quien anda ahí..?





2 comentarios:

  1. Los enamorados, me encanta este capitulo y lo que representa, Luz y Hemis, Shiva y tivi....a todos nos gusta disfrutar del encanto del amor en toda
    su expresión...gracias mi amor por permitirme leerte...besos...

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    1. gracias a ti mi vida por pasear por mis letras... besotes amor

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